Nuevo material para el ahorro de energía

Imaginemos que el sol da de lleno en nuestra ventana y esto aumenta hasta límites incómodos la temperatura de casa. Pero hay un material diez veces más delgado que un cabello que consigue rebajar unos cuantos grados la temperatura de la ventana y, en consecuencia, del interior. Y eso, además de confort, significa un gran ahorro en aire acondicionado. Esto es lo que han conseguido investigadores del Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología (ICN2) y del Instituto de Ciencia de Materiales de Madrid (ICMM-CSIC), con la creación de este nuevo material. Su trabajo se ha publicado en la revista Small.

El nuevo material es capaz de eliminar calor y así enfriar la superficie en la que se coloca sin consumo de energía ni emisiones de gases de ningún tipo. Está formado por una matriz de esferas de sílice de 8 micras de diámetro -8 millonésimas de metro, diez veces más delgado que un cabello humano. Comparado con granos de arena, tienen un volumen un millón de veces más pequeño.

El material se inspira en el mecanismo de regulación de temperatura de la Tierra, llamado enfriamiento radiativo. Nuestro planeta recibe radiación ultravioleta del Sol y esto hace aumentar la temperatura de la superficie. Pero una parte de esta energía vuelve al espacio como radiación infrarroja. Así la temperatura se regula. Y precisamente el efecto invernadero, provocado por gases como el dióxido de carbono, hace que buena parte de esta radiación infrarroja quede retenida y la temperatura de la Tierra aumente. En todo caso, lo que ha interesado a los investigadores es que los principales responsables de la expulsión de la radiación son los granos de arena de los desiertos.

Una de las principales aplicaciones sería enfriar las placas solares, para que un calor excesivo disminuye su rendimiento. Los investigadores han demostrado que con el nuevo material se puede enfriar hasta 14 ºC una oblea de silicio bajo la luz directa del Sol. Un vidrio común sólo rebaja la temperatura 5 ºC. En una superficie como la de un panel solar, tiene una potencia de enfriamiento radiativo de hasta 350 W / m2.